El Tau endereza el rumbo justo antes de afrontar los 'cuartos' de la Euroliga.
El Tau Cerámica logró poner fin a una racha de dos derrotas consecutivas tras imponerse al DKV Joventut por 99-65 en un partido perteneciente a la vigésimo séptima jornada de la ACB, que permite a los baskonistas afrontar con espíritu renovado su primer compromiso de 'cuartos' en Euroliga ante el Barcelona.
El Tau volvió a funcionar como una máquina perfectamente engrasada, gracias, en buena parte, a que mejoró en la faceta reboteadora. Los vitorianos aprovecharon su gran comienzo para construir ventajas importantes bajo los aros, lo que complementaron con el acierto exterior y el tiro de media-distancia.
Enfrente estaba un Joventut cariacontecido, que no encontraba respuesta y que contó con un Ricky Rubio desaparecido del Buesa Arena. Queriendo hacer la guerra por su lado, el joven base no fue el jugador que esperaba su equipo, que apenas podía señalar una figura a la que agarrarse para cambiar el decorado.
Así ocurrió que las ventajas fueron creciendo de forma descomunal. Del 18-10 al final del primer cuarto, se pasó al 49-27 del descanso, que comenzaba a concebirse como definitivo. Lo fue mucho más cuando Mirza Teletovic lograba un triple estratosférico a los 25 minutos para dejar el 62-35 en el electrónico.
Entretanto, Prigioni arrebató algo de protagonismo a Rakocevic, Splitter y Mickeal con algún pase de fantasía de espaldas a la canasta para hundir más a un DKV Joventut que en estas últimas jornadas ha descendido de la quinta a la tercera plaza.
De hecho, un triunfo mañana del Kalise Gran Canaria sobre el Bruesa GBC, le permitiría a los insulares igualar al conjunto de Badalona en la tabla. Los de Sito Alonso no aciertan a establecer un estilo que les haga únicos, que les permita recuperar tiempos mejores y recordar, aunque sólo sea de lejos, el DKV de la pasada campaña.
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