SEMANA DESASTROSA

Europa se atraganta a los españoles.

Los equipos españoles han completado una de las peores semanas europeas que se recuerdan en las últimas temporadas, ya que de seis representantes que disputaron Liga de Campeones o Copa de la UEFA ninguno de ellos logró la victoria ante rivales del viejo continente. Además, para dar una mayor gravedad al asunto, hay que recordar que todos los equipos menos el Barcelona jugaron en sus respectivos estadios.

Lo peor lo protagonizaron el Deportivo y el Valencia, quienes no tendrán la oportunidad de corregir sus errores en el choque de vuelta al caer eliminados ante rivales de menos entidad en los dieciseisavos de final de la Copa de la UEFA. Los gallegos fueron goleados de nuevo ante los daneses pese a la campaña que habían realizado antes del partido, donde pedían a sus seguidores que llenaran Riazor y llevaran en volandas al equipo hacia una noche mágica como las de antaño.

En cuanto a la máxima competición del viejo continente, el Real Madrid se llevó la peor parte. Cayó ante el Liverpool en el Santiago Bernabéu y deberá remontar la eliminatoria en Anfield Road, donde le espera un ambiente hostil y un equipo muy trabajado para afrontar una cita en la que se juegan gran parte de la temporada. Al otro equipo de Madrid no le fueron mucho mejor las cosas, dejó que el Oporto marcara dos tantos en el Vicente Calderón y tendrá que ganar el choque de vuelta, algo que sólo conseguirá si mejora notablemente la imagen dada el pasado martes contra el conjunto luso.

El Villarreal tampoco logró encarrilar la eliminatoria en El Madrigal y tan sólo pudo empatar ante el Panathinaikos tras ver cómo el conjunto griego se ponía por delante en el choque de ida de los Octavos de Final. Los de Pellegrini volvían de nuevo a la competición que tanto hizo soñar a Villarreal pero no estuvieron acertados y se pudieron dar por satisfechos al seguir un partido más sin conocer la derrota en su estadio en la Liga de Campeones.

El único que dio la talla fue el Barcelona. Pese a la pequeña crisis de juego que puede atravesar el conjunto de Guardiola, los azulgrana dieron la talla en Lyon y empataron el partido tras empezar perdiendo. El líder de la Liga encarrila la eliminatoria que podía tener más a su favor si hubiese estado más acertado de cara a puerta o en contra si Benzema hubiese logrado marcar en las ocasiones de gol que tuvo a lo largo del partido.

Estos tropiezos los podrán solucionar los equipos de Champions dentro de dos semanas, cuando se disputen los choques de vuelta y donde se espera que el fútbol español demuestre por qué cuenta con la mejor liga del mundo.